Con el endurecimiento de las regulaciones sobre el alquiler vacacional en ciudades como Madrid, muchos propietarios están considerando nuevas opciones para seguir rentabilizando sus propiedades. Una de las alternativas más prometedoras es el alquiler temporal para empresas, una modalidad legal, estable y dirigida a un perfil profesional.
Si tienes un piso turístico sin licencia o tienes licencia, pero buscas un modelo de alquiler más predecible, convertir tu propiedad en un alquiler temporal para empresas podría ser la solución.
En este artículo, te explicamos cómo hacerlo paso a paso y cómo Homyspace puede facilitarte el proceso para lograrlo con éxito.
¿Por qué cambiar del modelo turístico al alquiler temporal para empresas?
La oferta de pisos turísticos ha aumentado considerablemente en los últimos años, pero también lo han hecho las restricciones como una alternativa más sostenible, legal y con menor rotación de inquilinos.
Este modelo permite ofrecer tu propiedad a trabajadores que se desplazan temporalmente a otra ciudad por motivos laborales, como consultores, técnicos, arquitectos, profesionales de la restauración de edificios o ingenieros, entre otros. Las estancias suelen estar entre uno y 11 meses, y se regulan mediante contratos de alquiler temporal.
Ventajas del alquiler temporal para empresas
Convertir tu vivienda en un piso de alquiler temporal para empresas ofrece múltiples ventajas frente al alquiler turístico tradicional. Este modelo, centrado en alojar a trabajadores que se desplazan por motivos laborales, permite al propietario alquilar de forma más sencilla, segura y eficiente.
Legalidad sin complicaciones
A diferencia del alquiler vacacional, este modelo no requiere una licencia turística. El arrendamiento se formaliza mediante un contrato de temporada, totalmente legal y recogido en la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU). Esto permite operar dentro del marco normativo vigente, sin necesidad de cumplir con los requisitos exigidos a las viviendas de uso turístico, ni con las restricciones que muchas ciudades están imponiendo a ese tipo de alojamiento.
Ingresos estables y previsibles
Las estancias en el alquiler temporal para empresas suelen tener una duración media de entre cuatro semanas y varios meses. Esto reduce la rotación constante de inquilinos y minimiza los periodos en los que la vivienda está vacía. Además, al trabajar directamente con empresas o profesionales desplazados, los pagos suelen ser puntuales y acordados previamente, lo que facilita la planificación financiera del propietario.
Inquilinos solventes y profesionales
El perfil del inquilino en este tipo de alquiler es muy diferente al del alquiler turístico. Se trata de empleados de empresas que viajan por motivos laborales y que buscan un alojamiento tranquilo, funcional y bien comunicado para su estancia profesional. Son personas que cuidan el espacio, cumplen con las normas y tienen un comportamiento más predecible, lo que se traduce en mayor seguridad y tranquilidad para el propietario.
Menor desgaste del inmueble
El uso que hacen los trabajadores desplazados es mucho más racional y respetuoso que el de los inquilinos turísticos, que a menudo solo buscan un lugar para dormir entre planes de ocio. Al haber menos rotación, menos equipaje y un uso más responsable, el desgaste natural del piso se reduce considerablemente. Esto significa menos gastos de mantenimiento, limpieza o reparaciones.
Buena convivencia con la comunidad de vecinos
Uno de los grandes problemas del alquiler vacacional es el conflicto que puede generar con la comunidad: ruidos, entradas y salidas constantes, mal uso de zonas comunes o falta de empatía con el entorno residencial. En el modelo de alquiler temporal para empresas, ese tipo de incidencias prácticamente desaparece. El inquilino se comporta como un vecino más, lo que mejora la convivencia y evita que la propiedad sea motivo de quejas vecinales.
¿Qué necesitas para adaptar tu piso?
Convertir una vivienda pensada para el turismo en un piso de alquiler temporal para empresas no requiere grandes reformas, pero sí es necesario tener en cuenta varios aspectos clave para asegurarte de que el alojamiento cumpla con las necesidades de los trabajadores desplazados. Aquí te dejamos las claves para preparar tu propiedad y adaptarla a este tipo de alquiler:
Equipamiento completo y funcional
El inquilino que llega por motivos laborales busca comodidad, practicidad y autonomía. Tu piso debe estar listo para vivir sin que el trabajador tenga que preocuparse por nada. Esto incluye:
- Mobiliario completo y en buen estado: cama con colchón cómodo, sofá, armario, mesa de comedor, sillas, escritorio o una zona de trabajo si es posible.
- Electrodomésticos funcionales: nevera, lavadora, microondas, cocina equipada, cafetera, plancha, etc.
- Menaje básico: vajilla, cubertería, utensilios de cocina, sartenes, ollas, vasos, etc.
- Ropa de cama y toallas: muchas empresas lo requieren para facilitar la llegada del trabajador.
- Conexión a internet de calidad: aunque no es estrictamente obligatorio, contar con una conexión rápida y estable puede hacer tu propiedad mucho más atractiva.
Lo más importante es ofrecer un alojamiento cómodo, limpio y bien mantenido que permita al inquilino vivir de manera independiente desde el primer día.
Imagen profesional y cuidada
Una buena presentación del inmueble influye directamente en su ocupación. Desde Homyspace, te ayudamos a preparar tu anuncio para que tu piso sea más atractivo para las empresas.
- Fotografías de calidad: bien iluminadas, actualizadas y que muestren el espacio tal como es.
- Decoración neutra y acogedora: tonos claros, espacios ordenados y estilo funcional.
- Limpieza impecable: la primera impresión siempre es importante para cualquier trabajador desplazado.
El objetivo es que el piso proyecte una imagen profesional y resulte agradable tanto para estancias cortas como medias.
Buena ubicación y conexión
Aunque tu vivienda no esté en el centro, puede resultar muy atractiva si está bien conectada con áreas empresariales, polígonos industriales o centros de trabajo. Algunos aspectos que valoran las empresas incluyen:
- Proximidad al lugar de trabajo o fácil acceso mediante transporte público.
- Cercanía a servicios básicos: supermercados, farmacias, restaurantes, etc.
- Opciones de aparcamiento si el trabajador se desplaza en coche.
- Entornos tranquilos y seguros que favorezcan el descanso y la rutina diaria.
Desde Homyspace analizamos cada caso para identificar qué tipo de demanda encaja mejor con tu ubicación y te ayudamos a posicionar tu propiedad según su valor real.
Claridad en las condiciones el alquiler
Es fundamental establecer desde el principio las condiciones del alquiler temporal:
- Precio mensual o por estancia (todo incluido o con gastos aparte).
- Duración mínima y máxima del contrato.
- Normas básicas de uso del inmueble (no fumar, no mascotas, etc).
- Horarios de entrada y salida, y tipo de entrega de llaves.
En Homyspace nos encargamos de formalizar el contrato con todos estos detalles bien definidos, para asegurar que tanto el propietario como la empresa que aloja al trabajador tengan una experiencia clara y sin sorpresas.
¿Por qué elegir Homyspace?
Llevamos años liderando el sector del alquiler temporal para empresas en toda España. Miles de compañías han confiado en nuestra plataforma para ofrecer alojamiento a sus empleados durante sus desplazamientos laborales.
Nuestro equipo está compuesto por expertos que comprenden las necesidades específicas tanto de empresas como de inquilinos. Nos encargamos de todo el proceso, brindándote tranquilidad total: desde la publicación del inmueble, la gestión y la firma del contrato, hasta el soporte durante la estancia y asesoramiento constante.
